La ameba comecerebros, ¿una amenaza real en piscinas y lagos?

Hace tres años se dio en España el primer caso registrado de meningitis amebiana primaria (MAP), mortal en el 97% de los casos. El aumento de la temperatura enciende la alarma ante estas amenazas invisibles que pueden proliferar en aguas dulces.

Vicente Alcaíde

Infección por ameba comecerebros. IStock.
Infección por ameba comecerebros. IStock.

En 2018, una niña de diez años de Toledo fue noticia por partida doble, al convertirse en el primer caso registrado en España de la meningitis amebiana primaria (MAP) y recuperarse milagrosamente de esta enfermedad, mortal en el 97% de los casos y de la que apenas hay una docena de supervivientes en el mundo. La Naegleria fowleri, también llamada ameba comecerebros, es la causante de esta rara dolencia de la que la literatura científica recoge unos 400 casos.

No ha sido hasta marzo de este año cuando la piscina cubierta “Siglo XXI”, de Torrijos (Toledo) ha reabierto, tras ser el escenario del primer episodio de “ameba comecerebros” registrado en España, contraído por una niña de 10 años, que salvó su vida milagrosamente, ya que este tipo de infección parasitaria es mortal en la inmensa mayoría de los casos, al destrozar el cerebro.

La piscina, inaugurada en el año 2000, cerró entonces y se invirtieron 100.000 euros en obras de reforma, además de incrementar el nivel de cloro y bajar la temperatura del agua para evitar la aparición de microorganismos. En abril de 2019, tras su reapertura, tuvo que cerrar de nuevo, porque volvió a detectarse la presencia del protozoo en uno de los dos vasos de la instalación deportiva.

La meningoencefalitis amebiana primaria se caracteriza por un fuerte dolor de cabeza, fiebre, vómitos, alucinaciones y convulsiones

La piscina de Toledo ha estado cerrada dos años, tras el caso de la ameba comecerebros.
La piscina de Toledo ha estado cerrada dos años, tras el caso de la ameba comecerebros. Foto: IStock.

La meningoencefalitis amebiana primaria se caracteriza por un fuerte dolor de cabeza, fiebre, vómitos, alucinaciones y convulsiones. Casi siempre es fatal a las dos semanas de haber presentado los síntomas.

La enfermedad se suele contraer al nadar o bucear en aguas expuestas como lagos de agua dulce, ríos y aguas termales, también puede encontrarse en aguas residuales, piscinas mal mantenidas o fuentes de agua potable geotermal. Descubierta en el sur de Australia en 1965, se sabe que afecta principalmente a niños y también a adultos jóvenes. La ameba se adhiere a las mucosas nasales y, tras ascender por los nervios olfativos, alcanza el cerebro.

El ameboide 'Naegleria fowleri' puede encontrarse en lagunas, estanques y piscinas
El ameboide 'Naegleria fowleri' puede encontrarse en lagunas, estanques y piscinas. Foto: IStock.

 Si bien, es poco común, recientemente se ha observado un aumento de casos en algunos países como Estados Unidos, Filipinas y el sur de Brasil, además de algunas regiones de Asia.

Proliferación de casos y cambio climático

Por otro lado, investigadores norteamericanos han señalado que el cambio climático pudiera aumentar los casos de meningoencefalitis, ya que los patógenos que se transmiten por el agua prosperan y se multiplican más rápido en aguas cada vez más cálidas, dijeron los expertos a ABC News.

"Es probable que a medida que aumenten las temperaturas, el agua se convierta en un ambiente más hospitalario para albergar organismos"

"Con el cambio climático continuo, esto no desaparecerá", afirmó Darien Sutton, médico de medicina de emergencia de Los Ángeles. "Es probable que a medida que aumenten las temperaturas, el agua se convierta en un ambiente más hospitalario para albergar organismos, no solo como éste, sino también otras bacterias y patógenos que pueden dañar a los niños pequeños que solo intentan divertirse en un lago en verano."

Las zonas de aguas sucias o estancadas son dieales para la proliferación de la ameba comecerebros.
Las zonas de aguas sucias o estancadas son ideales  para la proliferación de la ameba comecerebros. Foto: IStock.

Las infecciones de Naegleria fowleri en el pasado han sido raras en Estados Unidos, debido probablemente a que las aguas no alcanzaban temperaturas lo suficientemente cálidas para albergarlas, dijo Sutton.

Sin embargo, en los últimos 10 años, en EEUU, se han diagnosticado cada vez más casos fuera de los estados recurrentes de esta enfermedad, como Florida y Texas, en el sur. Minnesota y Maryland, al norte, son dos de ellos.

Investigadores españoles descubren posible tratamiento

Sin embargo, no todo van a ser malas noticias respecto a esta ameba comecerebros.

Recientemente, un grupo de investigadores españoles halló un compuesto aislado de las hojas de una planta medicinal tradicional, la inula viscosa o falsa coral de cabeza amarilla, que mataría a las amebas haciendo que “cometa suicidio celular”.

La inuxolina A mató a las amebas en el laboratorio, al romper las membranas y provocar cambios mitocondriales

Con este descubrimiento, los científicos esperan que este hallazgo pueda conducir a nuevos tratamientos.

Investigadores españoles han descubierto improtantes avances en esta enfermedad.
Investigadores españoles han descubierto improtantes avances en esta enfermedad. Foto: IStock.

Ellos hicieron un extracto de etanol de las hojas de esta hierba, encontrando que podía matar a la Naegleria fowleri. Después aislaron y probaron compuestos específicos del extracto.

El más potente, la inuxolina A, mató a las amebas en el laboratorio, al romper las membranas y provocar cambios mitocondriales, condensación de cromatina y daño oxidativo. Esto obligó a los parásitos a sufrir una muerte celular programada o apoptosis.