Descubre cuántos colores tiene el arcoíris

Es tiempo de tormentas y de arcoíris. Puede que, últimamente al observar uno, hayas nombrado sus siete colores. Pues, olvídate de ello. Contar siete colores en el arcoíris responde a una falsa creencia inculcada por el gran científico Isaac Newton en el siglo XVII, llevado por su pasión por la alquimia. En realidad, es una degradación de colores, una extensa gama de cada uno de ellos.

Un arcoíris doble aparece en el cielo, tras una intensa lluvia
Un arcoíris doble aparece en el cielo, tras una intensa lluvia

Estos días en los que una tormenta puede sosprender en cualquier lugar, es también el momento de ver los impresionantes arcoíris. Este auténtico regalo de la naturaleza, que aporta luz y color a un día de lluvia, es un fenómeno de lo más popular. ¿Quién no se sabe de memoria todos sus colores? ¿Cuántas veces de niño has repetido eso de: los colores del arcoíris son siete: rojo, naranja, amarillo, verde, azul, añil y violeta?

Sin embargo, esto ni es tan sencillo ni está tan claro y la clave de todo ello se encuentra ni más ni menos que en ese número siete. Y así lo ha explicado recientemente la web de meteorología Meteored, que hace referencia a una falsa creencia iniciada por el mismísimo Isaac Newton.

Cómo se forman los colores del arcoíris

En primer lugar, es importante recordear cómo se forman los colores del arcoíris. Es el resultado de la refracción de los rayos del sol a través de las gotas de lluvia que se mantienen suspendidas en la atmósfera. De tal manera que la luz blanca del sol atraviesa la gota de agua, que hace de prisma, y se descompone en los colores del arcoíris.

Quien vislumbró por primera vez este fenómeno meteorológico fue el considerado padre de la gravedad, Isaac Newton (1642-1727). Para ello, el científico inglés dispuso una estancia en total oscuridad, con una ventana con un pequeño orificio, por el que entraba un rayo de luz solar. En medio de la habitación y delante de éste, colocó un prisma, de tal modo que lo atravesaba y reflejaba la luz en la pared opuesta, en la que aparecían los colores.

Quien vislumbró por primera vez este fenómeno meteorológico fue el considerado padre de la gravedad, Isaac Newton

Él mismo, en su libro Óptica (Opticks), explicaba este experimento así: "En una recámara muy oscura, en un agujero redondo de aproximadamente un tercio de pulgada de ancho, coloqué un prisma de vidrio por el cual el rayo de luz del Sol que entraba por ese agujero podía ser refractado hacia la pared opuesta del cámara y allí formar una imagen coloreada”.

Isaac Newton, en la habitación donde mostró cómo se forman los colores del arcoíris. Foto: Istock.
Isaac Newton, en la habitación donde mostró cómo se forman los colores del arcoíris.

Razón de los siete colores del arcoíris

Newton estableció que la luz blanca se descomponía en siete colores. Esta afirmación, según señala la web de meteorología, “estuvo fuertemente condicionada por su conocido interés por la alquimia y el mundo antiguo, donde el número 7 tiene un gran simbolismo y carácter mágico. La visión del cosmos de un personaje como Newton, como veremos a continuación, no podía desligarse del 7. El citado número aparecía en tantos lugares, que el arcoíris no podía ser una excepción”.

Dios bendijo el séptimo día, Roma se erguía sobre siete colinas, siete son las notas musicales, siete también son los metales de la alquimia, al igual que los días de la semana. ¿Quién no ha oído hablar de los siete mares de la antigüedad o de las siete edades del hombre?

Y es que la realidad es bien distinta. Solo basta fijarse para darse cuenta que contar solo siete o cualquier otro número de colores en el arcoíris es simplificar este asunto. No existe un único rojo o azul, porque en realidad es una degradación de colores, una extensa gama de cada uno de ellos.

Los colores del arcoíris atraviesan el cielo de un pequeño pueblo.
Los colores del arcoíris son en realidad una extensa gama, una degradación de los colores. Foto: Istock. Autor: DanielKrylov

Para reforzar esta aseveración, la web nos propone un reto: cuando veas un arcoíris intenta separar el añil del violeta. Se convertirá en una tarea imposible, salvo para aquellos que quieran seguir aferrándose al número siete.