Cuánta sangre tenemos en el cuerpo

La sangre transporta nutrientes, nos brinda oxígeno y nos protege contra todo tipo de infecciones. Pero ¿Cuánta sangre tenemos en el cuerpo? ¿Cuánta cantidad podemos perder?

Muchas personas se preguntan cuánta sangre tiene el ser humano y cuánta puede perder. Foto: IStock..
Muchas personas se preguntan cuánta sangre tiene el ser humano y cuánta puede perder. Foto: IStock..

La cantidad de sangre en el cuerpo humano depende de diversos factores, como la edad, el peso, el sexo e incluso dónde se viva. En líneas generales se estima que es el equivalente al 7 por ciento del peso corporal.

Vasos sanguíneos, los tubos a través de los cuales la sangre circula por el cuerpo.
Vasos sanguíneos, los tubos a través de los cuales la sangre circula por el cuerpo. Foto: IStock.

Veamos algunos ejemplos. Un recién nacidos tiene 75 mililitros (ml) de sangre por kilogramo de peso corporal. Si un bebé pesa alrededor de 3 kilos y medio, tendrá unos 270 mililitros de sangre en su cuerpo.

Las mujeres embarazadas cuentan con entre un 30 y un 50 por ciento más de volumen de sangre que las que no se encuentran en esta situación

En cuanto a los niños, uno que pese en torno a los 36 kilogramos de peso, tendrá aproximadamente 2,650 militros de sangre en su cuerpo.

Asimismo, un adulto que pese entre 70 y 80 kilogramos tendrá sobre 4.500 a 5.700 militros.

Mención aparte merece las mujeres embarazadas, ya que éstas para ayudar a sus bebés en el crecimiento, cuentan con entre un 30 y un 50 por ciento más de volumen de sangre que las que no se encuentran en esta situación.

Por otro lado, y tal y como se ha mencionado anteriormente, la cantidad de sangre en el cuerpo humano puede variar según el lugar donde se viva. Por ejemplo, las personas que viven en altitudes elevadas tienen más sangre, porque no hay tanto oxígeno en altitudes superiores.

Qué cantidad de sangre puede perder el ser humano

Dicho todo esto ¿Qué cantidad de sangre puede perder el ser humano? ¿La respuesta? Mucha.

Ya sea por un rasguño menor o una lesión mayor, durante nuestra vida perdemos mucha sangre. El término técnico para el sangrado se llama hemorragia y esto ocurre como consecuencia de que un vaso sanguíneo se rompe y sale sangre de él.

Los glóbulos rojos o hematíes son las células más numerosas de la sangre.
Los glóbulos rojos o hematíes son las células más numerosas de la sangre. Foto: IStock.

Sin embargo, en la mayoría de los casos no hay por qué preocuparse en exceso. Nuestros cuerpos suelen curarse rápidamente. Solo hay que recordar que cada vez que te cortas, puedes curarte sin tener que acudir al hospital. A través de un proceso conocido como coagulación, la sangre cambia de líquido a gel. Esto forma un coágulo, que detiene el sangrado para que el cuerpo tenga tiempo de recuperarse. Pero no siempre es así. Si se rompiera una arteria principal, como la vena yugular del cuello, se perdería mucha a un ritmo alarmante.

Los médicos clasifican el shock hemorrágico en cuatro clases, según la cantidad de sangre que se pierde

Si pierde demasiada sangre, el cerebro no recibe suficiente oxígeno para mantener la vida. Las personas que sufren lesiones y traumas graves, como un accidente automovilístico, pueden perder sangre muy rápidamente. La pérdida de una cantidad excesiva de sangre se conoce como shock hemorrágico. Los médicos clasifican lo clasifican en cuatro clases, según la cantidad que se pierde. En la fase IV, la cantidad de sangre que se pierde puede ser fatal.

Una mujer preparada para donar sangre
Una mujer preparada para donar sangre. Foto: IStock.

La primera etapa implica perder del 10 al 15 por ciento de su sangre. Si esto sucede, afortunadamente, no sentirá muchos efectos, quizás un mareo. En este sentido, hay que decir que cuando se dona sangre, se da aproximadamente del 8 al 10 por ciento de ella en una sola extracción.

El siguiente nivel sería perder entre el 15 y el 30 por ciento de su sangre. Eso es casi uno o dos litros, o lo suficiente para llenar una botella grande de Coca-Cola. En esta etapa, ya se perciben cambios importantes. La piel se enfría, aparece debilidad y el corazón late más rápido que nunca, con el fin de mantenerse con vida.

Y después de perder más del 50 por ciento de la sangre del cuerpo o aproximadamente unos 2,75 litros, la persona entrará en coma

Cuando la pérdida se sitúa por debajo del 40 por ciento, lo más probable es que ya se necesite una transfusión de sangre. El corazón latirá extremadamente rápido. Los vasos sanguíneos más pequeños se contraerán, lo que ayudará a que la sangre siga bombeando por todo el cuerpo.

Y después de perder más del 50 por ciento de la sangre o aproximadamente unos 2,75 litros, la persona entrará en coma. Su corazón dejará de latir y no podrá alimentar sus órganos, lo que hará que fallen todos. Pero, si recibe un tratamiento médico rápido, entonces tiene posibilidades de sobrevivir, aunque es poco probable.

Altos niveles de hierro en sangre podrían afectar a nuestra longevidad. iStock

Relacionado

Descubren un vínculo intrigante entre los niveles de hierro en sangre y la longevidad